Columnas
Cinco de los tantos mitos de la odontología
Es importante tener en cuenta que estos mitos pueden variar según la cultura y las creencias populares.
-Las caries siempre duelen:
Suele pasar que los pacientes que me visitan me comentan que vienen por una sola carie en particular, que les duele, pero que no tienen más y al hacerles la revisión, nos encontramos con que el paciente tiene una gran cantidad de caries. ¿Qué significa esto? que las caries no siempre duelen. Mayormente duelen cuando han llegado a tal profundidad que afectan a la dentina (tejido que forma el cuerpo del diente y que tiene sensibilidad). Las caries en sus primeros estados se encuentran en esmalte (tejido superficial del diente que no tiene sensibilidad) por lo tanto no generan dolor, lo ideal sería tratarlas en este momento. Por eso es sumamente importante la consulta odontológica para la detección temprana de esta patología.
-Las muelas de juicio deben extraerse siempre:
Este mito dental obviamente es falso, ya que se recomienda la extracción cuando estas muelas generan problemas e infecciones a los tejidos que las rodean o al diente vecino. Se suelen extraer por problemas de espacio o posición, es decir que si las muelas de juicio se encuentran totalmente íntegras, sanas, en buena posición y sin generar ningún problema, no hace falta sacarlas.
-El hilo dental o enjuague sustituyen el cepillado:
Estos aditamentos son considerados de lo más efectivos actualmente para la higiene bucal, pero como COMPLEMENTO, porque NUNCA van a sustituir al cepillado. Es decir siempre recurrimos al cepillado y, para mejorar la limpieza bucal, lo complementamos con hilo y/o enjuagues.
-El blanqueamiento daña los dientes:
Éste es uno de los mitos más frecuentes e incluso, según lo relatado por varios de mis pacientes, predicados por varios colegas. Antes se utilizaban “técnicas” que eran nocivas para los tejidos dentarios. El blanqueamiento dental ACTUAL, utiliza un ácido el cual, de manera resumida, abre los poros del esmalte de los dientes para penetrar y llegar a las manchas que hay por debajo de la superficie del diente, pero el esmalte se deja completamente intacto. Los poros del esmalte de los dientes, por lo general, se cierran de nuevo después de unos días durante los cuales tu odontólogo/a te dará algunas pautas a seguir para asegurar la eficacia del tratamiento. Siempre es importante un buen diagnóstico realizado por un profesional para evitar cualquier tipo de daño prevenible ya que todos los casos son diferentes.
-“Se me dañaron los dientes porque perdí el calcio con los embarazos”:
Esta frase o similares, son de lo más común en la consulta odontológica, ya que muchas personas creen que el bebé en gestación, le “saca” el calcio a los dientes de la madre, pero no es así. Durante el embarazo se producen cambios muy complejos a nivel sistémicos como por ejemplo alteraciones hormonales que repercuten a nivel bucal produciendo un aumento del riesgo de desarrollar una gingivitis (inflamación/sangrado de encías), como también a desarrollar caries o empeorar las ya existentes. Todo esto es totalmente evitable con una buena higiene bucal y con controles preventivos con tu odontólogo.
Estos son unos de los tantos mitos que rodean el mundo de la odontología. Mitos que la gente cree y difunde. Por eso siempre es recomendable ir a un control odontológico, por lo menos una vez al año, para evitar estos malos entendidos y para prevenir y/o tratar distintas patologías en estado temprano, las cuales son más fáciles de solucionar y menos invasivas. Debemos recordar que el diente es un tejido que una vez formado no vuelve a crecer.
Columnista: Odontólogo Lucas Agustín Ejarque / Mat: 09630